EXTERIOR de la CATEDRAL
Hoy la Catedral exhibe una fachada románica, la de Platerías al sur; dos barrocas, la del Obradoiro al oeste y el lienzo de la Puerta Santa al este; y una neoclásica, la de Azabachería o la Inmaculada, al norte.
FACHADA DEL OBRADOIRO
La plaza del Obradoiro a la que da esta fachada hace alusión al taller (obradoiro, en gallego) de canteros que funcionaba en la plaza durante la construcción de la catedral. Para proteger el Pórtico de la Gloria del deterioro que estaba sufriendo por las inclemencias meteorológicas, esta fachada y sus torres ya habían tenido varias reformas desde el siglo XVI. En el siglo XVIII se decidió construir la actual fachada barroca, obra de Fernando de Casas Novoa. Cuenta con unos grandes ventanales acristalados que permiten iluminar la antigua fachada románica y se encuentra entre las torres de las Campanas y de la Carraca. En medio del cuerpo central está Santiago Apóstol y un nivel más abajo sus dos discípulos, Atanasio y Teodoro, todos vestidos de peregrinos. En medio, la urna (representación del sepulcro encontrado) y la estrella (representación de las luminarias que vio el ermitaño Pelayo) entre ángeles y nubes. En la torre de la derecha está María Salomé, madre de Santiago, y en la torre de la izquierda su padre, Zebedeo. Sobre la balaustrada de esta parte izquierda puede verse a santa Susana y san Juan y sobre la de la derecha a santa Bárbara y Santiago el Menor.
Para subir hasta la entrada de la fachada se encuentra una escalera que fue construida entre 1594 y 1600 por Ginés Martínez, inspirándose en obras similares de Miguel Ángel, Donato de Bramante y Diego de Siloé. El resultado es una ingeniosa combinación de dos escaleras, una dentro de otra, para doblar las posibilidades de acceso y salida. Detrás de sus rejas se halla la cripta y, encima de ésta, una lonja o mirador que sirve de antesala a la entrada oeste.
Para subir hasta la entrada de la fachada se encuentra una escalera que fue construida entre 1594 y 1600 por Ginés Martínez, inspirándose en obras similares de Miguel Ángel, Donato de Bramante y Diego de Siloé. El resultado es una ingeniosa combinación de dos escaleras, una dentro de otra, para doblar las posibilidades de acceso y salida. Detrás de sus rejas se halla la cripta y, encima de ésta, una lonja o mirador que sirve de antesala a la entrada oeste.
FACHADA SUR O DE LAS PLATERÍAS
La fachada de las Platerías es la fachada meridional del crucero de la catedral de Santiago de Compostela y es la única fachada románica que se conserva en la catedral. Se edificó entre 1103 y 1117 y durante los siglos posteriores se le han ido añadiendo elementos procedentes otros lugares de la catedral. La plaza de las Platerías está delimitada por la catedral y el claustro en dos de sus lados; contigua a la catedral está la Casa del Cabildo.
Consta de dos puertas de entrada en degradación con arquivoltas y tímpanos historiados. Las arquivoltas están sobre once columnas adosadas, tres son de mármol blanco (la central y las de los extremos) y el resto de granito. En la central aparecen las figuras de doce profetas y en las laterales los Apóstoles. Sobre los tímpanos se encuentra un gran friso que está separado del cuerpo superior por una franja sostenida por canecillos grotescos; en este piso se encuentran dos ventanas que están adornadas por arquivoltas románicas.
En el friso, por ejemplo, conviven apóstoles, ángeles, signos zodiacales y representaciones del Pecado como la sirena o el centauro. El centro lo ocupa un estilizado Cristo, a cuyo lado está Santiago. En medio de los arcos se reconoce a Abraham saliendo de la tumba y a Moisés representado, como lo haría siglos más tarde Miguel Ángel, con cuernos. Los muros laterales también aprovecharon esculturas de la derruida Puerta del Paraíso, como la creación de Adán y Eva o el rey David en su trono.
Debajo del friso, el doble portal está dedicado a la doble naturaleza humana y divina del Hijo de Dios. El tímpano de la izquierda representa la Tentación de Cristo, con figuras añadidas como la famosa mujer adúltera con un cráneo en el regazo. El tímpano de la derecha muestra escenas que van desde la Epifanía a la Pasión, el juicio de Pilatos, el Prendimiento, la Flagelación y la traición de Judas.
TORRE DEL RELOJ
El portal de Platerías linda con la Torre del Reloj, que recibe el nombre popular de ‘Berenguela’ porque fue el arzobispo Berenguel de Landoira quien acabó su construcción en el s. XIV. Entonces era un robusto cubo defensivo coronado de almenas, cuya altura no superaba la posición actual del reloj.
En 1680 el arquitecto Domingo de Andrade convirtió la torre en una de las más hermosas de Europa: sobre el cubo gótico original instaló un primer cuerpo cuadrado perforado de pórticos, y sobre él un cuerpo octogonal rematado con una linterna, que se enciende durante los Años Santos para indicar el rumbo a los peregrinos. Baldaquinos y torretas completan la ascensión con decoración de motivos jacobeos y formas vegetales.
La torre alberga la mayor de las campanas de la Catedral, conocida también como Berenguela. La original de 1678 se rajó y fue sustituida por la actual, que pesa 6.433 kilos y suena con un profundo do cuando el reloj del s. XIX, con su única aguja, marca las horas. Se dice que si alguna medianoche toca no 12, sino 13 campanadas, el demonio gozará de una hora mágica para andar suelto.
Consta de dos puertas de entrada en degradación con arquivoltas y tímpanos historiados. Las arquivoltas están sobre once columnas adosadas, tres son de mármol blanco (la central y las de los extremos) y el resto de granito. En la central aparecen las figuras de doce profetas y en las laterales los Apóstoles. Sobre los tímpanos se encuentra un gran friso que está separado del cuerpo superior por una franja sostenida por canecillos grotescos; en este piso se encuentran dos ventanas que están adornadas por arquivoltas románicas.
En el friso, por ejemplo, conviven apóstoles, ángeles, signos zodiacales y representaciones del Pecado como la sirena o el centauro. El centro lo ocupa un estilizado Cristo, a cuyo lado está Santiago. En medio de los arcos se reconoce a Abraham saliendo de la tumba y a Moisés representado, como lo haría siglos más tarde Miguel Ángel, con cuernos. Los muros laterales también aprovecharon esculturas de la derruida Puerta del Paraíso, como la creación de Adán y Eva o el rey David en su trono.
Debajo del friso, el doble portal está dedicado a la doble naturaleza humana y divina del Hijo de Dios. El tímpano de la izquierda representa la Tentación de Cristo, con figuras añadidas como la famosa mujer adúltera con un cráneo en el regazo. El tímpano de la derecha muestra escenas que van desde la Epifanía a la Pasión, el juicio de Pilatos, el Prendimiento, la Flagelación y la traición de Judas.
TORRE DEL RELOJ
El portal de Platerías linda con la Torre del Reloj, que recibe el nombre popular de ‘Berenguela’ porque fue el arzobispo Berenguel de Landoira quien acabó su construcción en el s. XIV. Entonces era un robusto cubo defensivo coronado de almenas, cuya altura no superaba la posición actual del reloj.
En 1680 el arquitecto Domingo de Andrade convirtió la torre en una de las más hermosas de Europa: sobre el cubo gótico original instaló un primer cuerpo cuadrado perforado de pórticos, y sobre él un cuerpo octogonal rematado con una linterna, que se enciende durante los Años Santos para indicar el rumbo a los peregrinos. Baldaquinos y torretas completan la ascensión con decoración de motivos jacobeos y formas vegetales.
La torre alberga la mayor de las campanas de la Catedral, conocida también como Berenguela. La original de 1678 se rajó y fue sustituida por la actual, que pesa 6.433 kilos y suena con un profundo do cuando el reloj del s. XIX, con su única aguja, marca las horas. Se dice que si alguna medianoche toca no 12, sino 13 campanadas, el demonio gozará de una hora mágica para andar suelto.
FACHADA NORTE O DE AZABACHERÍA
La fachada de Azabachería se encuentra en la Plaza de la Inmaculada o de la Azabachería, donde desemboca el último tramo urbano de los caminos Francés, Primitivo, del Norte e Inglés a través de la antigua puerta Francígena o puerta del Paraíso. El portal románico fue construido en 1122 por Bernardo, tesorero del templo. Este portalón fue demolido tras haber sufrido un incendio el año 1758; algunas piezas escultóricas que se salvaron fueron colocadas en la fachada de las Platerías. La nueva fue proyectada en estilo barroco por Lucas Ferro Caaveiro y terminada porDomingo Lois Monteagudo y Clemente Fernández Sarela en estilo neoclásico, aunque conservó algunos trazados del barroco, el año 1769.
En la parte superior de la fachada se encuentra una estatua de Santiago del siglo XVIII, con dos reyes a sus pies en posición de oración: Alfonso III y Ordoño II. En el centro se encuentra la estatua de la Fe.
En la parte superior de la fachada se encuentra una estatua de Santiago del siglo XVIII, con dos reyes a sus pies en posición de oración: Alfonso III y Ordoño II. En el centro se encuentra la estatua de la Fe.
FACHADA ESTE O DE LA QUINTANA
La fachada de la catedral que da a la plaza de la Quintana tiene dos puertas, la Puerta Real, de estilo barroco, iniciada bajo la dirección de José de Vega y Verdugo por José de la Peña de Toro en 1666 y finalizada por Domingo de Andrade en 1700, que realizó unas grandes columnas que abarcan dos plantas de ventanales, una balaustrada con grandes pináculos y un edículo con una escultura ecuestre de Santiago (hoy desaparecida), muy adornado con decoración de racimos de frutas y trofeos militares a gran escala. Por esta puerta accedían los reyes de España a la catedral, de ahí su nombre, y sobre su dintel se encuentra el escudo real.
La llamada Puerta Santa o Puerta del Perdón es la más cercana a las escalinatas, está generalmente cerrada con una reja y se abre sólo los años jubilares, el día 31 de diciembre del año anterior. Fue una de las siete puertas menores y estuvo dedicada a san Pelayo (cuyo monasterio está justo enfrente). Sobre esta puerta se pueden ver en unas hornacinas la imagen de Santiago y sus discípulos Atanasio y Teodoro a su lado. En el cuerpo inferior y a ambos lados de la puerta se colocaron veinticuatro figuras de profetas y apóstoles (incluida la del propio Santiago) que provenían del antiguo coro de piedra del maestro Mateo. En el interior de esta puerta pasando un pequeño patio se encuentra la verdadera Puerta Santa, por la que se entra al deambulatorio del ábside del templo.
La llamada Puerta Santa o Puerta del Perdón es la más cercana a las escalinatas, está generalmente cerrada con una reja y se abre sólo los años jubilares, el día 31 de diciembre del año anterior. Fue una de las siete puertas menores y estuvo dedicada a san Pelayo (cuyo monasterio está justo enfrente). Sobre esta puerta se pueden ver en unas hornacinas la imagen de Santiago y sus discípulos Atanasio y Teodoro a su lado. En el cuerpo inferior y a ambos lados de la puerta se colocaron veinticuatro figuras de profetas y apóstoles (incluida la del propio Santiago) que provenían del antiguo coro de piedra del maestro Mateo. En el interior de esta puerta pasando un pequeño patio se encuentra la verdadera Puerta Santa, por la que se entra al deambulatorio del ábside del templo.